Las erupciones volcánicas y el calentamiento global

Las erupciones volcánicas y el calentamiento global

Las erupciones volcánicas podrían tener influencia sobre una posible pausa en el calentamiento global del planeta.

Así lo afirma un estudio de investigación publicado en la revista Nature Geoscience, realizado por un grupo de expertos del Laboratorio Nacional Lawrence Livermore en California explica esta hipótesis.

El trabajo indica que los modelos de predicción a largo plazo no han tenido en consideración el enfriamiento que las últimas emisiones de las partículas volcánicas han causado en la troposfera.

Las erupciones tendrán mayores efectos en el clima al calentarse la Tierra

Las erupciones tendrán mayores efectos en el clima al calentarse la Tierra

Las erupciones de gran magnitud tendrán mayores efectos a medida que el clima continúe calentándose.

Sin embargo, los efectos de enfriamiento de las erupciones pequeñas y medianas podrían reducirse hasta en un 75 %.

Estas son las principales conclusiones de un estudio de investigación realizado por la Universidad de Cambridge y la Oficina Meteorológica del Reino Unido, que ha sido publicado recientemente en Nature Communications.

Las erupciones volcánicas y el calentamiento global

Los aerosoles aumentan la cobertura nubosa

Los aerosoles expandidos por eventos naturales o por la actividad humana contribuyen al aumento de la cobertura nubosa en mayor medida de lo que se pensaba.

Mientras que diversos estudios de investigación anteriores demostraron su incidencia en el incremento de las precipitaciones ahora, un nuevo trabajo se ha centrado en el impacto de la cobertura nubosa.

Para ello, en lugar de usar modelos climáticos los investigadores aprovecharon la circunstancia de diversas erupciones volcánicas para estudiar su huella en la atmósfera.

Un verano 2021 de pirocumulonimbos excepcionales en Norteamérica

Un verano 2021 de pirocumulonimbos excepcionales en Norteamérica

Otro verano más, los pirocumulonimbos se hacen notar en los cielos de Norteamérica. Una pésima noticia.

En el 2000, los científicos atmosféricos del Laboratorio de Investigación Naval de los EEUU (NRL) dieron la voz de alarma.

Informaron por primera vez de que las columnas de humo de los incendios forestales intensos podían generar tormentas eléctricas imponentes que canalizaban el humo a una altura igual o superior a la de los aviones a reacción.

Estos eventos de pyrocumulonimbus, pirocumulonimbos, pyroCb, o cumulonimbus flammagenitus, cautivaron a los científicos en ese momento. Antes de ese descubrimiento, se pensaba que solo las erupciones volcánicas explosivas y las tormentas eléctricas extremas eran capaces de elevar el material tan alto.