noreaster3

Tras un mes de diciembre de 2015 en que en la Costa Este de los USA se batieron récords de temperaturas máximas ahora, en la misma zona, se enfrentan a una de las peores borrascas invernales de los últimos tiempos. Geografía y Meteorología se alían para dar vida a uno de los fenómenos invernales más agresivos en los USA: los noreaster.

Ni más ni menos, los noreaster son borrascas invernales que se forman a través de ciclogénesis rápidas o explosivas, y que se desplazan con un movimiento tal que discurren de forma casi paralela a la Costa Este de los USA.

Uno de estos fenómenos, bautizado allí con el nombre de Jonas, es el que está provocando uno de los peores temporales invernales que se recuerdan en amplios territorios de la mitad oriental del país. En la figura superior, a través de una imagen visible de alta resolución adquirida ayer, 23 de enero de 2016, por el satélite Suomi NPP de la NASA, podemos verlo en acción.

¿Por qué es tan peligroso un noreaster?

La exclusiva disposición geográfica de Norteamérica, en su amplio conjunto de países, hace que mediante tierra estén conectadas latitudes tropicales con latitudes árticas. Con una configuración atmosférica precisa, los desalojos de aire ártico gélido es más fácil que alcancen bajas latitudes que en otras zonas del planeta que no gozan de esta singular disposición.

Nivel de 850 hPa: flujo de vientos y temperatura (colores), análisis del modelo meteorológico GFS, 23 enero 2016, 12 UTC.

Nivel de 850 hPa: flujo de vientos y temperatura (colores), análisis del modelo meteorológico GFS, 23 enero 2016, 12 UTC.

Este tipo de borrascas invernales, que se forman en el sur del país para luego discurrir cerca de la Costa Este, tienen la singularidad de ayudar en la formación de enormes expansiones de aire polar y ártico, tal como se observa en la figura superior. Así, la interacción entre estas borrascas y el anticiclón que se forma en el interior norte de Norteamérica, ayuda a desalojar este frío ártico hacia el sur.

De este modo, la combinación de este frío ártico que se extiende fácilmente sobre el continente, al no tener los intercambios de calor que tendría al discurrir sobre un océano, junto con la humedad arrancada de aguas tropicales y de la Zona de Convergencia Inter Tropical o ZCIT, desemboca en nevadas descomunales en los estados del sur, sureste y este.

Este twit del Centro de Predicciones Oceánicas del Servicio Meteorológico Nacional de los USA nos permite identificar claramente cómo se desarrolla y propaga un noreaster. En este caso, Jonas.

Además de las intensas nevadas, otro potencial peligro de estas borrascas son las marejadas ciclónicas, capaces de producir inundaciones en las zonas costeras debido a los intensos vientos que son capaces de generar, incluso con fuerza de huracán.

Sin lugar a dudas, no hay otro lugar en el mundo en que concurran todas estas singularidades para que se produzcan temporales invernales como los que acontecen en la Costa Este de los USA. Quizás Japón o el este de China podrían tener configuraciones atmosféricas de efectos similares.

La borrasca invernal (noreaster) Jonas, vista desde la Estación Espacial Internacional.

Gracias al astronauta Scott Kelly podemos disfrutar de perspectivas increíbles de la borrasca Jonas, y de cómo ha quedado todo nevado a su paso.

Vista desde la ISS de la Costa Este de los USA, nevada, tras el paso de la borrasca invernal Jonas, 23 enero 2016.

Vista desde la ISS de la Costa Este de los USA, nevada, tras el paso de la borrasca invernal Jonas, 23 enero 2016.

Por otro lado, una manifestación de estos enormes contrastes entre las masas de aire gélido polar y ártico desalojado hacia el sur, y las masas de aire húmedo y cálido tropical, fue la actividad convectiva incluyendo rayos y relámpagos, en las que fueron en algunos lugares auténticas tormentas de nieve.

Vista desde la ISS de la nubosidad asociada a la poderosa borrasca invernal Jonas, con relámpago incluido.

Vista desde la ISS de la nubosidad asociada a la poderosa borrasca invernal Jonas, con relámpago incluido.

Esta espectacular instantánea, muestra la nubosidad asociada a la borrasca Jonas y, casi en el centro, un resplando azul eléctrico inconfundible, que corresponde a un relámpago.

Nevadas descomunales, incluso de récord.

Las redes sociales se han llenado de vídeos y fotografías increíbles de las descomunales nevadas caídas en algunos lugares, en algunos casos incluso de récord.

Por ejemplo, el mítico Central Park de Nueva York, con 68 cm. de nieve en 24 horas; un nuevo récord para esta localidad.

Mientras tanto, también dan fe de lo ocurrido las comparativas del antes y después del paso de Jonas…

…o mejor aún un vídeo timelapse, en el que se aprecia cómo la nieve, literalmente, se traga barrios enteros.

En el foro de debate estamos haciendo recopilación con las mejores imágenes y vídeos.