Ondas gravitatorias, nubes undulatus asperatus, Atlanta, EEUU.

Ondas gravitatorias, nubes undulatus asperatus, Atlanta, EEUU. El pasado 25 de febrero de 2014, los habitantes de la ciudad de Atlanta, estado de Georgia, EEUU, levantaron la vista hacia el cielo con sorpresa, al percatarse de las extrañas formaciones nubosas que había sobre ellos. ¿A qué se debía este cielo tan espectacular?

Nubes undulatus asperatus ¿nueva variedad?

Este tipo de nubes, que forman como ondas en el cielo en una configuración muy particular, ha sido propuesta para ser una nueva variedad, siendo clasificada a parte, y esperando a ser reconocida por la Organización Meteorológica Mundial.

Oficialmente, dicho reconocimiento aún no se ha producido, y sería el primero desde 1951, cuando se añadiera el tipo Cirrus intortus.

La polémica surge desde el momento en que ya existe la variedad undulatus, que está reconocida oficialmente e incluida en el Atlas de Nubes, y a la cual pertenecen este tipo de nubes; algunos se preguntan si es necesario tener una nueva variedad, si ya hay una en la que pueden ser clasificadas estas formaciones.

Ondas gravitatorias, origen de estas formaciones nubosas.

Quizás no en todos los casos, pero sí a menudo, estas formaciones nubosas onduladas, a modo de grandes olas, pero en vez de en el océano, en la base de una capa de nubes, están relacionadas con ondas gravitatorias.

Es el caso de lo ocurrido en Atlanta; se trató de nubes undulatus asociadas a ondas gravitatorias asociadas al paso de un flujo de vientos a través de un sistema de montañas que provocó una perturbación en el flujo y dando origen a estas ondas en la capa nubosa.

Ondas gravitatorias asociadas al paso de un flujo de vientos sobre montañas, y localización de Atlanta.

Afortunadamente, contamos con una imagen adquirida por el Espectro Radiómetro de Imágenes de Resolución Moderada (MODIS) montado a bordo del satélite AQUA de la NASA, en que se ha marcado con un círculo rojo la localización aproximada de Atlanta, y la presencia de nubes orográficas asociadas a ondas gravitatorias por el paso de un flujo de vientos de poniente sobre el sistema montañoso que da al noroeste de la ciudad.

Esta imagen confirma el origen de las ondas que se observaron en esta ciudad.

Existen casos realmente llamativos en que, si se deja una cámara haciendo una grabación a intervalos (timelapse), se puede comprobar cómo estas ondas se van propagando, como si de un océano se tratase.

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En nuestro país también se producen casos como este, como es el caso de la Costa Tropical granadina, en abril de 2012, o en septiembre de 2004, con una formación mucho más llamativa.

Dentro de Europa, destaca el caso de las montañas de Schiehallion, Escocia.

En algunas ocasiones, las ondas gravitatorias, además de dar origen a estas espectaculares formaciones de nubes, también pueden asociarse a otros fenómenos meteorológicos, como subidas súbitas de temperatura o incluso vendavales repentinos, en configuraciones atmosféricas propicias.


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