Días atrás se midió el mínimo anual de la banquisa ártica en 2021, resultando el duodécimo más bajo de la serie

Días atrás se midió el mínimo anual de la banquisa ártica en 2021, resultando el duodécimo más bajo de la serie.

Un dato que, sin ser bueno, supone al menos una mejoría respecto a lo medido en los últimos años.

En esta ocasión, el mínimo se alcanzó el pasado 16 de septiembre, jornada en la que empezó a detectarse una recuperación del hielo marino del Ártico.

El mínimo anual de la banquisa ártica mejora en 2021

La extensión de hielo marino se define como el área total en la que la concentración de hielo es de al menos del 15 %.

Bajo esa premisa, el 16 de septiembre de 2021 los satélites meteorológicos estimaron 4,72 millones de kilómetros cuadrados.

Un dato más alto que en años recientes

Sin que haya que lanzar las campanas al vuelo, podemos alegrarnos de la noticia pues en 2020 y 2019 fueron la segunda y la tercera más bajas registradas, con 3,74 y 4,14 millones de kilómetros cuadrados respectivamente.

Es decir, respecto al año pasado la mejoría sería de un 25% aproximadamente.

Se derritió menos banquisa ártica

Los datos que maneja la NASA indican que en 2021 se derritió menos hielo marino.

Incluso cuando el planeta en su conjunto estaba más cálido de lo habitual, con nuevos récords de temperatura en América del Norte y Eurasia, con la sequía asolando al oeste de EE.UU. y con episodios de derretimiento intenso en la capa de hielo de Groenlandia.

¿Qué mejoró entonces las condiciones de la banquisa ártica en 2021?

En la parte más septentrional del Ártico, las condiciones se mantuvieron generalmente frías y tormentosas en todo el Océano Ártico.

Durante gran parte del verano, las bajas presiones en la zona favorecieron los cielos nublados, disminuyendo la cantidad de luz solar que llegaba al hielo.

Además, las tormentas también pueden esparcir el hielo, lo que ralentiza el declive de su extensión.

También, tenemos que añadir el episodio de nevadas intensas que se registraron al Sur-Sudeste de Groenlandia por la llegada de los restos de Larry.

Evolución temporal de la extensión del hielo marino ártico

En cualquier caso, los especialistas en el tema nos advierten siempre que las tendencias a largo plazo son más importantes que cualquier año, sea una temporada positiva o negativa.

Y esas tendencias siguen apuntando fuertemente a la baja.

De hecho, las 15 extensiones mínimas más bajas en el récord de satélites de 43 años se han producido en los últimos 15 años (2007 a 2021).

Además, el hielo marino tiende a ser más joven y más delgado; es decir, hay menos hielo de varios años que sobrevive una temporada de verano y se espesa durante el invierno siguiente.

Por ejemplo, parece haber una buena cantidad de hielo en los mares de Beaufort y Chukchi pero han adelgazado bastante, aunque afortunadamente no hubo suficiente energía durante el verano para derretirlo por completo.