Sydney registró esta semana una tormenta de granizo muy importante, descrita como catastrófica en algunas áreas de la urbe australiana por las autoridades.

En el Hemisferio Sur, el verano está llegando, pero es habitual que se produzcan estos episodios un año tras otro. No es nada extraño que en esta época del año se recopilen imágenes y vídeos como los que os mostramos a continuación.

Tormentas organizadas en muchas zonas

Esta violenta tormenta de granizo de Sydney formaba parte de un enjambre de células tormentosas de rápido movimiento que azotaron cientos de kilómetros de la costa de Nueva Gales del Sur con fuertes lluvias y un tiempo salvaje.

Múltiples frentes de tormenta convergieron en Hunter Valley, Wollongong y Sydney el pasado jueves por la tarde, lo que provocó una advertencia de tiempo severo por parte de la Oficina de Meteorología.

Algunas áreas muy dañadas

Según informan los medios locales, Grafton, Tamworth y Moree, al norte, y Nowra y Batemans Bay, en la costa sur, se encontraban en la línea de fuego junto con Newcastle, Gosford, Sydney y Wollongong, siendo las zonas más afectadas por estas piedras descomunales.

Para que el granizo adquiera tamaños tan descomunales, teniendo el cuenta lo que puede pesar una bola de hielo así (más de medio kilo), las corrientes ascendentes dentro de la nube tormentosa tuvieron que ser extraordinariamente intensas, lo cual solo sucede en caso de convección profunda y organizada.

Otras pedregadas descomunales

Este tipo de granizadas son muy llamativas, sobre todo cuando caen en lagos, piscinas o en el mar… Cuando el tamaño de las piedras es muy grande, parece como si estuviera hirviendo el agua.

A lo largo de los años, hemos ido recopilando en cazatormentas muchos de estos momentos, que por desgracia, pueden provocar daños en la agricultura, el bosque o en la ciudad importantes.