En época anticiclónica son frecuentas la nieblas de advección y radiación

En época anticiclónica son frecuentas la nieblas de advección y radiación en España. La estabilidad atmosférica está asociada a la aparición de las nubes bajas, en las zonas llanas y hundidas, con ambientes de calma, así como en zonas costeras.

Se trata de un hecho relativamente habitual en los meses más fríos del año cuando se ubican sobre nosotros los anticiclones de bloqueo.

A continuación, explicamos la génesis de ambos meteoros y la diferencia entre ambos tipos de niebla.

Nieblas de advección

Son aquellas que se producen cuando una masa de aire relativamente cálido y húmedo se mueve sobre aguas relativamente frescas.

La diferencia de temperatura entre ambos elementos, aire y agua, permite que la humedad contenida en la masa de aire condense en su zona más próxima a la superficie más fría.

Por ejemplo, se dan en la costa mediterránea en verano cuando el agua se enfría mucho y sobre ella llega una masa de aire templada y muy húmeda.

En la costa cantábrica, más fría, puede aparecer en invierno, con muy mar muy muy frío, al llegar una masa de aire más templada sobre la superficie marítima.

Más detalles sobre las nieblas de advección

Es decir, se tratan de nieblas marinas que necesitan de condiciones bastante precisas para su formación. Como todos sabemos, las masas de aire tienen un contenido variable en vapor de agua.

¿Qué hace falta para que se forme la niebla a partir de una masa de aire dada? Que esa masa se enfríe hasta alcanzar el punto de rocío. En ese momento, el vapor de agua se condensa en gotitas, dando lugar al coloide que es la niebla.

Animación del satélite EUMETSAT en su canal visible durante la mañana del 24-6-2017, observándose el banco de niebla en el Mar de Alborán

Coincidiendo con una temperatura del agua del mar relativamente baja, al desplazarse la masa de aire cálido africana sobre el Mar de Alborán, se enfría en su base alcanzando el punto de rocío y formando finalmente las nieblas.

La particularidad añadida a los bancos de niebla es que, cuando alcanzan la costa, además de elevar hasta casi la saturación la humedad relativa del aire, provoca que las temperaturas se mantengan frescas,  produciendo fuertes contrastes entre puntos cercanos no afectados por la niebla.

Nieblas y nubes bajas en la Meseta Norte, Valle del Ebro y otros valles de Extremadura en una imagen visible del satélite Meteosat

Cuando aparecen en verano, la sensación de bochorno es muy característica, en zonas próximas a la niebla, por una combinación de temperatura y elevada humedad relativa.

Nieblas de radiación

Son aquellas que se forman cuando, durante las noches de invierno despejadas, el suelo pierde calor por radiación. Este fenómeno hace que se enfríe rápidamente.

Al hacerlo, provoca que la humedad contenida en la masa de aire inmediatamente encima, se condense. Y entonces, surge la niebla.

Estas pueden ser de larga duración, si el viento no las disipa, o si se forman confinadas en valles o tierras bajas rodeadas de montes o montañas.

Estas nieblas, en ocasiones, consiguen elevarse del suelo, y pasan a convertirse en nubes bajas.