Las ondas gravitatorias pueden ser captadas desde los satélites meteorológicos

Las ondas gravitatorias son ondas atmosféricas, que pasan desapercibidas para los humanos a no ser que sean captadas desde los satélites meteorológicos o que cierto tipo de nubosidad nos dé pistas de su presencia.

En este caso, el espectro radiómetro de imágenes de resolución moderada (MODIS) del satélite TERRA de la NASA capturó esta imagen en color natural el pasado 4 de octubre de 2020, fotografiando una serie de bandas de nubes onduladas (nubes ondulatorias) ondeándose sobre el Océano Pacífico cerca de Baja California.

Ondas gravitatorias, o de montaña

Las nubes onduladas (a veces llamadas nubes undulatus o onduladas) como estas son el producto de las ondas de gravedad atmosféricas.

Ondas de montaña en la zona centro

Por lo general, se forman cuando algo fuerza una masa de aire hacia arriba. Veamos el proceso:

  • El aire se enfría a medida que sube y, si hay suficiente humedad en el aire, el agua se condensa y forma nubes.
  • Una vez que el aire ha pasado por encima del obstáculo, normalmente vuelve a hundirse.
  • El aire se calienta a medida que desciende, evitando que se formen nubes.
  • Como las ondas en un estanque, la perturbación inicial crea una onda que se propaga y continúa expandiéndose
  • Ello hace que el aire suba y baje una y otra vez hasta que la onda se disipa.
  • El resultado final son largas líneas de nubes que marcan las crestas de las olas, con áreas libres de nubes entre ellas que corresponden a los valles entre las ondas.

Las nubes onduladas a menudo se forman cuando las montañas o islas fuerzan el flujo de aire hacia arriba.

En este caso, el tren de ondas probablemente fue causado por la colisión de masas de aire frío y caliente, con el aire frío empujando el aire más caliente hacia arriba.

Cuando el grupo de nubes ondulatorias pasó por la isla Guadalupe, las corrientes cruzadas en el flujo de aire creado por el terreno accidentado de la isla hicieron que una bolsa de aire hacia el oeste fuera menos susceptible a la formación de nubes.

Ondas gravitatorias y vórtices de Von Karman

La isla Guadalupe a menudo crea algunas calles impresionantes con vórtices de von Karman, pero hacer desaparecer brevemente las bandas de nubes de una formación ondular es uno de sus trucos más impresionantes.

Una fabulosa visión que solo podemos ver desde el espacio en su máximo esplendor, pues su dimensión es inabarcable desde tierra firme.

Aquí, tenemos este ejemplo gracias al Instituto Cooperativo de Estudios Meteorológicos por Satélite de la Universidad de Wisconsin-Madison (CIMSS).

Vórtices de von Kárman a sotavento de la Isla Jan Mayen

Estas no fueron las únicas nubes ondulatorias llamativas a lo largo de la costa del Pacífico de América del Norte en los últimos días.

Allí los vientos del noroeste que fluyen más allá de la escarpada costa de Point Reyes, California, generaron una serie de llamativas bandas de nubes el 3 de octubre de 2020, que eran similares a las olas de proa.

Su relación con el Efecto Föehn

Nada mejor para explicarlo que utilizar este vídeo que la Agencia Meteorológica Británica Met Office emplea cada vez que se da un evento de estas características en el Reino Unido.

Básicamente, el Efecto Foehn es un proceso meteorológico que se produce en varias fases y en el que intervienen por necesidad los accidentes orográficos de una región.

Las montañas actúan en primer lugar como una rampa de ascenso de las masas de aire.

En este caso, cuando las masas de aire ascienden por la ladera expuesta de la montaña, se enfría y en ocasiones se produce la condensación de la humedad que contiene, formándose nubosidad y dejando lluvia.

Una vez que las masas de aire han alcanzado la cumbre, comienzan a descender por la otra cara de la montaña, desprovistas de su humedad.

Al ir descendiendo, la masa de aire sufre otro proceso termodinámico denominado compresión adiabática.

Es decir, la masa de aire cada vez tiene encima una columna de aire mayor que provoca su compresión y su calentamiento.

Además, al tratarse de un fenómeno de subsidencia (movimiento vertical descendente de las masas de aire) es imposible el desarrollo de nubosidad.

Por eso, en las imágenes de los satélites meteorológicos se identifican las llamadas ondas de montaña, que son nubes formando calles u ondas, a consecuencia de estos procesos de ascensos/descensos.